La imagen muestra la finalización de uno de los montajes de Cabezones de la Feria. Según indican algunos textos, al terminar cada obra los personajes invitaban a bailar a alguien del público la conocida cueca "La rosa y el clavel". En este caso quienes bailan al centro del improvisado escenario de la función, son el personaje Roboberto e Isidora Aguirre. El espectáculo de Cabezones de la Feria fue producto de la iniciativa desarollada por Isidora Aguirre y apoyada por el gobierno de la Unidad Popular titulada "Teatro Experimental Popular Aficionado" (TEPA) que fue llevada a cabo en la década de los 70' en Santiago y en otras ciudades del país. El objetivo que perseguia Isidora era acercar el teatro y educar a la gente sobre las transformaciones que se estaban realizando en el gobierno de la Unidad Popular a los sectores populares como una forma de informar y concientizar las ciudades que visitasen. La manera de poder cumplir dicho objetivo, era que las personas que compusiesen esta obra teatral, provenientes de grueso modo de los sectores populares, debian realizar breves y sencillos dialogos en donde ellos explicasen los cambios que estaban ocurriendo al país como una manera de contraponer la informacion de los medios asociados con la derecha chilena que tergiversaban la realidad.